Visita a la Ruta de las antiguas fábricas


No podía faltar en nuestro trabajo una visita a la Ruta de las Antiguas Fábricas.

 El valor de esta ruta reside en el importante patrimonio histórico industrial de Béjar que constituye una importante identidad cultural de su floreciente pasado textil. La mayor parte de las fábricas se encuentran abandonadas en la actualidad, pero sus imponentes figuras a lo largo del río son testigo de la historia y de formas de producción ligadas al contexto sociocultural reciente de los bejaranos. La situación de las fábricas a lo largo del río no es casual, sino que cumple la función básica de aprovechar la corriente de agua para dar servicio a las fábricas y poner en movimiento sus máquinas o alimentar turbinas hidráulicas. Para aprovechar mejor esta agua, parte de la corriente se represa en las distintas “pesqueras” que permiten distribuir el agua por los canales. Durante la ruta, se puede observar la pesquera de los Caballos, la pesquera de los Capitanes, la pesquera Tapia y la pesquera de los Ladrones.

Esta ruta es un camino sencillo y agradable que transcurre en su totalidad por un paseo fluvial/ El paseo bordea el río en el tramo que atraviesa Béjar por su extremo norte a la altura del casco urbano y va pasando por varias de las fábricas ribereñas, algunas muy significativas en el desarrollo industrial de la ciudad.

El recorrido total de ida y vuelta es de aproximadamente 4 km y a un paso normal se recorre en aproximadamente una hora y media. En lugares estratégicos del recorrido se encuentran paneles que permiten al caminante interpretar lo que se está viendo.

Una larga pasarela junto al cauce del río sirve ahora para hilvanar un paseo que encandilará a quienes gusten de husmear en los remiendos del pasado, ya sean vencidos templos románicos o edificios fabriles fuera de uso. La pasarela se toma desde la carretera que lleva por el interior de Béjar hacia Ciudad Rodrigo.

Trescientos metros después de pasar el puente sobre el río Riofrío, una señal en el lado izquierdo de la carretera anuncia el inicio del paseo a la altura de la antigua fábrica de Luis Izard Muñoz. El carril, escoltado todo él por una larga barandilla quitamiedos, flanquea la orilla derecha del río mientras lleva al paseante de fábrica en fábrica y el reguero de paneles, estratégicamente apostados, ponen al corriente de los detalles relativos a cada uno de los difuntos recintos fabriles.

 

 

El Rincón de Castilla




Comentarios

Entradas populares